Todo sobre la planta Aglaonema: cuidados variedades y consejos de cultivo

La planta Aglaonema, también conocida como Evergreen chino, es una de las plantas de interior más populares gracias a su hermoso follaje arqueado. La gran variedad de tonalidades y dibujos de las aglaonemas les confiere su belleza tropical característica, por lo que son perfectas para acentuar cualquier interior. También son increíblemente fáciles de cuidar y muy resistentes, lo que convierte a la Aglaonema en la planta de interior ideal para los principiantes o para cualquiera que desee una planta de interior de bajo mantenimiento.

¿Qué es una Aglaonema?

La planta Aglaonema es miembro de la familia de las Aroideas, a la que también pertenecen plantas como la Monstera y el Filodendro. Esta familia de plantas se encuentra principalmente en el sudeste asiático y en las zonas tropicales de Australia, y es conocida por sus grandes hojas brillantes y, a menudo, de colores.

La Aglaonema tiene un crecimiento moderado, alcanzando generalmente entre 2 y 3 pies de altura. Las hojas son grandes y, en algunas especies, pueden llegar a medir hasta 16 pulgadas de largo. Tienen una textura lisa y cerosa, y suelen estar rizados con tonos blancos, amarillos crema e incluso rosas.

Variedades de Aglaonema

Existen alrededor de 21 especies conocidas de Aglaonema y un sinfín de variedades híbridas y de cultivo. Algunas variedades comunes de Aglaonema son las variedades «Siam», «Silver Queen», «White Wing» y «Red Gold».

La variedad «Siam» es una de las más populares. Tiene un llamativo follaje verde rematado por un crujiente borde blanco. Mientras tanto, la variedad «Silver Queen» es una Aglaonema verde plateada impresionante con hojas puntiagudas, y la variedad «White Wing» tiene venas primarias blancas que contrastan con las hojas verdes de la planta. Por último, la variedad «Red Gold» presenta reflejos anaranjado-rojizos en el borde de las hojas.

Cuidados de la Aglaonema

Las Aglaonemas son extremadamente fáciles de cuidar y requieren muy poca atención. Prosperan en condiciones de luz baja a moderada, y se deben mantener alejadas del sol directo. Prefieren un ambiente ligeramente húmedo, por lo que puede que quieras pulverizarlas ocasionalmente o utilizar un humidificador en la habitación. Mantener la temperatura entre 60 y 86 grados es ideal para las Aglaonemas.

Las Aglaonemas hay que regarlas con regularidad, pero ten cuidado de no regarlas en exceso, ya que esto puede causar podredumbre de raíces. Espera hasta que los 2,5-5 cm (1-2 pulgadas) superiores del suelo estén secos antes de regar. Es mejor regar la planta con agua a temperatura ambiente sobre el suelo, y evitar mojar las hojas.

Las Aglaonemas comen poco y deben abonarse aproximadamente cada tres meses con un fertilizante líquido equilibrado. También puedes utilizar un fertilizante de liberación lenta, pero asegúrate de no sobrealimentar las plantas, ya que esto puede dañar sus raíces.

Cultivo de Aglaonema

El cultivo de Aglaonema es tan sencillo que puede hacerse a partir de esquejes. Toma un esqueje del tallo de una planta Aglaonema madura, asegurándote de que tenga 10 cm de tallo y varias hojas. Sumerge el esqueje en hormonas de enraizamiento y colócalo en una maceta con un suelo bien drenado.

Coloca la maceta en un lugar cálido y bien iluminado, pero fuera del alcance directo del sol. Mantén la tierra húmeda, pero no encharcada. En pocas semanas, empezarás a ver cómo se forman las raíces. Una vez que el esqueje esté bien enraizado, puedes tratarlo como a cualquier otra planta Aglaonema.

Conclusión

La planta Aglaonema es una planta de interior hermosa y de bajo mantenimiento, perfecta para añadir un toque tropical a cualquier habitación. Con su impresionante variedad de tonalidades y dibujos, así como su resistencia y facilidad de cuidado, las Aglaonemas son una gran elección para cualquiera que desee añadir un toque de verdor a su hogar.

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